EL HOMBRE DEL BANDONEON Murió Leopoldo Federico
El gran bandoneonista y director de orquesta falleció a los 87 años en el Sanatorio de la Trinidad. Como músico y compositor de tango desarrolló una carrera de más de 55 años de trayectoria, en los que tocó con figuras como Alfredo Gobbi, Osmar Maderna, Emilio Balcarce, Héctor Stamponi, Carlos Di Sarli, Astor Piazzolla y Horacio Salgán, hasta formar su propia orquesta en los años 50
El emblemático músico de tango falleció hoy a las 5:15 de la madrugada, según confirmaron desde la Asociación Argentina de Intérpretes (AADI), de la que Federico era su presidente. Sus restos serán velados desde las 19 en la Legislatura porteña.
Nacido el 12 de enero de 1927 en el barrio porteño de Once, fue uno de los bandoneonistas más importantes de la música nacional y un destacado referente en mundo del tango, donde dio su primer gran salto antes de cumplir 20 años en la orquesta del compositor y pianista Juan Carlos Cobian.
Muy joven integró las orquestas del violinista Alfredo Gobbi, Víctor D’Amario, hasta que fue convocado como primer bandoneón por el reconocido pianista Osmar Maderna. Luego formó parte de los cuerpos musicales de Mores, Héctor Stamponi, Di Sarli, Lucio Demare y Salgan, y tiempo después constituyó su primera orquesta, que fue co-dirigida por el pianista Atilio Stampone.
Antes de cumplir los 30, Federico fue convocado por Piazzolla para reemplazar a Roberto Pansera en el Octeto Buenos Aires, hasta que en 1959 grabó su primer disco solista. Ese mismo año, acompañó al frente de su orquesta a Julio Sosa, con quien grabó tangos inolvidables como El Firulete, Cambalache, Mano a Mano, Nada, Que me van a hablar de Amor, En esta tarde gris, Uno, Rencor, y una original versión de La Cumparsita.
El bandoneonista permaneció al lado de Sosa hasta su trágica muerte en un accidente automovilístico en 1964. Años más tarde formó un cuarteto con el guitarrista Roberto Grela. Tiempo después conformó un trío de tango junto al pianista Osvaldo Berlingieri y al contrabajista Fernando Cabarcos, al que llamaron Trío Federico-Berlingieri-Cabarcos.
Desde hacía más de 40 años encabezaba su propia orquesta con instrumentalistas destacados del ámbito del tango a los que nutría con su arrolladora trayectoria. En cuanto a su repertorio, se destacan Cabulero, Retrato de Julio Ahumada, Preludio Nochero, Diagonal Gris, Siempre Buenos Aires, Al galope y Cautivante.
«Es parte de la historia del bandoneón, no se puede negar, y lo puede decir cualquiera, desde los chicos de 17 años que tratan de tocar como él, hasta los mayores», resumió la importancia de Federico el guitarrista Horacio Malvicino, en declaraciones al canal de noticias TN.
Además del reconocimiento de sus pares y de sus seguidores, Federico fue galardonado con distintos premios como el Gardel a la trayectoria, el Grammy latino, en dos oportunidades, mientras que también fue declarado ciudadano ilustre de la Ciudad de Buenos Aires, en 2002.
La muerte del bandoneonista impacta al mundo del tango, que el domingo pasado fue sacudido con el fallecimiento del escritor y poeta Horacio Ferrer tras sufrir una complicación cardiaca.
«Tuve la suerte de que se me cumplieran los sueños: tocar con Horacio Salgán fue un regalo del destino, Astor Piazzolla es lo insuperable, me recuerdo junto a Julio Sosa y quisiera empezar todo de vuelta para volver a hacer lo mismo», había manifestado Federico hace dos años, como una suerte de balance de su trayectoria, al recibir un reconocimiento en la Cámara de Senadores.